Hace unas fechas os mostrábamos a través de las redes sociales unas fotos de unas torrijas caseras realizadas con naranjas y sin nada de leche, unas torrijas perfectas para los que no pueden o no quieren tomar leche. O simplemente para aquellos que, como nosotros, adoramos los cítricos y especialmente las naranjas ecológicas.
A raíz de aquellas fotos fuisteis muchas y muchos los que aprovechasteis para pedirnos a través de las redes que por favor os pasásemos la receta. Y aunque hemos tardado más de lo previsto, lo prometido es deuda para nosotros en Biovalle.
Afortunadamente el trabajo no nos ha permitido ponernos a escribir esta entrada hasta ahora. Que todavía estamos inmersos en el final de nuestra campaña de cítricos, seis meses después de su inicio.
Primero queremos hablaros un poco de las torrijas, para que os pongáis en contexto. Las torrijas son rebanadas de pan, originalmente pan duro de varios días, que normalmente se empapan en leche o vino, se rebozan en huevo, y se fríen con buen aceite de oliva virgen extra ecológico preferentemente. Y una vez fritas se endulzan con miel, almíbar o azúcar, dándoles un toque aromático con canela. Esta es la forma más habitual y tradicional de hacer las torrijas.
Sobre su origen
Parece que su origen es tan antiguo que se le puede seguir la pista hasta la época romana, donde ya se le menciona en el siglo I d.C. Su nombre parece que viene de torrar (tostar).
Su consumo, más o menos habitual desde entonces hasta la actualidad, fue relacionándose con la Cuaresma y la Semana Santa, por los motivos que comentan desde Sevillamiatours (http://sevillamiatours.com/torrijas-una-dulce-historia/):
En Cuaresma se dan dos factores que motivan el consumo de torrijas: el ayuno y el excedente de alimentos. Hace años se ayunaba desde el Miércoles de Ceniza al Viernes Santo. Este ayuno habían de cumplirlo las personas entre los 7 y 59 años a excepción de embarazadas y enfermos. Al ayunar, sobraban alimentos, y había excedentes como el pan y había que buscar utilidades para no desperdiciarlo. Con idea de reutilizar este pan duro se cocinan las torrijas, echando mano de ingredientes fáciles de conseguir como la leche o los huevos.
Antiguamente se trabajaba exhaustivamente en campos y huertas y se permitía en Cuaresma la ingesta de pequeños bocados con un gran aporte calórico para rendir en las tareas diarias. De ahí que las torrijas y pestiños sean pequeños, para poder ser ingeridos fácilmente.
Torrijas de naranjas orgánicas, la receta
Compartimos con vosotr@s la receta de Sensi Ocaña (Mama Biovalle), que tanto tiempo lleva haciéndolas, convirtiéndose en una gran experta de este exquisito e hipercalórico alimento. Sin duda menos calórico y más saludable al sustituir la leche por zumo de naranja.
Ingredientes:
-Pan de molde, o el que más os guste, cortado en rebanadas. Os tenemos que recomendar el de Biopan, de Subbética Ecológica.
-Zumo de naranjas ecológicas de Biovalle (las cadeneras son estupendas para las torrijas)
-Miel de azahar, si es posible. En nuestro caso es de colmenas instaladas entre nuestros cítricos mientras florece el azahar.
-Aceite de oliva virgen extra ecológico (nos gustan cualquiera de los aceites de nuestros amigos productores de la asociación subbética ecológica: Bioluz, Ecomardom, Mondelia, Tierra de Renacimiento; y por supuesto el de Olivo Vivo. Aceites deliciosos todos, pero de diferentes variedades y características, para todos los gustos).
-Huevos. En nuestro caso son de nuestras gallinas, pero también los de Ecomardom de Subbética Ecológica son deliciosos.
Manos a la obra:
1-Se exprimen las naranjas y se hace zumo. A continuación se mojan las rebanadas de pan y se empapan bien. Después las apartamos.
2-Se baten los huevos y se pasan las rebanadas por el huevo batido, una a una.
3-Se fríen las rebanadas en aceite.
4-Se extienden las rebanadas fritas sobre papel absorbente de cocina para escurrir el exceso de aceite.
5-Se pone un cazo a hervir con miel de azahar y un poco de zumo de naranja para conseguir un almíbar cítrico.
6-Una vez hecho el almíbar, se pasan las torrijas una a una por el mismo, dándoles la vuelta para que se recubran lo máximo posible.
7-Se colocan en una bandeja que sirva para su presentación, y se espolvorean por los dos lados con canela, y después se les añade por encima el almíbar sobrante.
8-Se dejan enfriar, y después se guardan en una fiambrera hermética o similar en el frigorífico.
De esta forma podéis conseguir unas torrijas exquisitas, saludables, y sin lactosa ni proteína láctea, ideales para l@s que tenéis alguna intolerancia o alergia relacionadas con la leche. Sólo os podemos recomendar que no os paséis con su ingesta, porque dejarían de ser todo lo saludables que en pequeñas cantidades pueden ser.
Naranjas Ecológicas Biovalle es un proyecto de citricultura ecológica familiar desarrollado desde la localidad de Palma del Río. En Biovalle puedes comprar naranjas ecológicas y otros cítricos biológicos, apadrinar naranjos, o realizar visitas organizadas para conocer el día a día de la gestión de la finca.